José Carlos del Coso: Esta es mi opinión y afortunadamente solo tengo una. Le guste a quien le guste y le pese a quien le pese.


16 de febrero de 2013

Proyecto EuroRealMadrid

En pocos meses se pondrá en marcha el proyecto de Eurovegas en la Comunidad de Madrid. El Real Madrid pondrá la primera piedra a ese proyecto porque en dos semanas se juega a una sola carta su prestigio, su futuro y su proyecto. Hagan juego señores, háganlo en Old Trafford o en el Camp Nou ¿Quién da más? El conjunto merengue se verá avocado en pocos días a diseñar lo que va a ser de aquí a final de temporada en los dos peores sitios de Europa en la actualidad y en solo 180 minutos. Mal momento para que Coentrao deje de fumar y buen momento para que Florentino Pérez comience.
En las últimas cuatro temporadas, el Real Madrid no ha sido capaz de vencer una sola  eliminatoria europea contra un rival de entidad. Cayó en 2010 con el Lyon, en 2011 con el Barcelona, en 2012 con el Bayern y podría hacerlo sin sorprender a nadie contra el Mánchester United el día 5 de marzo de 2013. En Copa del Rey, el Real Madrid será lo que el Fútbol Club Barcelona quiera que sea, ni depende de sí mismo en el marcador ni en el juego. Es cierto que en este maravilloso deporte puede ocurrir cualquier cosa, pero tanto las sensaciones, como el ambiente y la presión juegan en contra del conjunto de Mourinho. Es demasiado tarde para que un equipo que no ha jugado absolutamente a nada en los últimos tiempos, se refugie en el buen juego ante un posible descalabro. Cuando pierdes jugando bien al fútbol, el aficionado queda abandonado a la impotencia, a la rabia o a la injusticia, pero también a la ilusión y al orgullo. Cuando pierdes jugando mal, no queda absolutamente nada. Todo desaparece bajo una pirámide de indignación, bochorno y amargura.
Si  Ignacio González, Presidente de la Comunidad de Madrid, lograse el permiso para que se fume en los casinos de Eurovegas y si al magnate estadounidense Sheldon Adelson, rey del vicio organizado, se le ocurriese exigir la legalización de la ruleta rusa, quizás podría inspirarse en la situación merengue. Si el gusto por el mal fútbol fuese una bala de esa pistola, Mourinho y su Real Madrid ya estarían muertos. A lo largo de la historia he visto salir por la puerta trasera de Concha Espina a entrenadores, presidentes e incluso futbolistas por no jugar bien al fútbol pese a obtener resultados excelentes. El terror que ha impuesto el Fútbol Club Barcelona en cada sorteo de Champions, humillando a los clubes más poderosos de Europa sobre el terreno de juego, ha precipitado las ansias madridistas por ganar y al mismo tiempo ha aumentado su conformismo frente a la técnica y la plasticidad. Manuel Pellegrini pensó que el tiempo jugaba a su favor por afrontar un proyecto lo suficientemente largo como para permitirle ir encajando todas las piezas. Se equivocó o le engañaron. Mourinho ha dispuesto de todo el tiempo del mundo, ya van tres años, cuando precisamente el técnico portugués desprecia el tiempo y el puzle. A Pellegrini le quitaron lo que más necesitaba, la confianza, y se la dieron a Mourinho que no la necesita para nada, pues su tiempo lo emplea esperando con la boca abierta para ver cuántos títulos le caen por el propio peso estadístico que puede ofrecerle su fantástica plantilla. No es una hipótesis sino un teorema matemático, por el cual, si tiras una moneda al aire un millón de veces, en 500 mil ocasiones la moneda caerá de una cara y en 500 mil ocasiones caerá de la otra. En la situación actual, de cada diez títulos que el Madrid dispute siendo entrenado por Mourinho o por Eddie Murphy, ganará uno o dos por pura fuerza estadística.
Es difícil comprender que existan tendencias futbolísticas orientadas a pensar que jugar bien es sinónimo de perder y viceversa. Si este juego contiene alguna lógica irrefutable es que el camino más recto a la victoria es una mezcla de virtuosismo y ambición. Basar todos los objetivos única y exclusivamente en la ambición de ganar, en el “carácter de ganador”, es un riesgo demasiado innecesario y una cualidad insuficiente. La prueba más evidente de que el técnico madridista siente desprecio por el buen fútbol es que ni tan siquiera en una liga que tiene más que perdida, intenta recolocar esas piezas que ya empezó a encajar Manuel Pellegrini en busca del dorado futbolístico. La practicidad de Mourinho no le permite emplear ni un segundo en algo que no se puede ganar, mientras para otros técnicos la victoria comienza en el camino seguido para levantar un trofeo.
¿Puede el Real Madrid eliminar a Mánchester y Barcelona en las eliminatorias de Champions y Copa? Por supuesto, con la misma certeza de que la moneda lanzada caiga el millón de veces de la misma cara como ya le ocurrió al Chelsea la temporada pasada de flexionando esa teoría.

  • votar

6 comentarios:

  1. Bien explicado. Y puede clasificarse para una o para las dos, o puede quedar eliminado en ambas. Coincido

    Yo hablaba de algo parecido en mi blog y acabo de publicarlo hace 4 minutos
    http://unblogmuycule.blogspot.com.es/2013/02/correr-y-robar.html

    ResponderEliminar
  2. Excelente, excelente, excelente artículo. Sí, me he repetido tres veces, pero el podio te lo merecías por completo.

    ResponderEliminar
  3. Testigo, en su línea, NUNCA defrauda. Análisis certero e indiscutible de la fantasía merengue. De ilusión también se vive. Otra cosa es la pura realidad. El mejor camino para ganar es jugar bien al fútbol. Evidente. Sobre el césped se demuestra cada semana. Para los merengues la máxima aspiración es presionar y condicionar arbitrajes como única herramienta para superar al FCB. Esta temporada, sin la inestimable colaboración arbitral, la DIFERENCIA salta a la vista -16 puntos. Anteponen emplear juego sucio y violencia antes que jugar al fútbol. Así les va. Con arbitrajes valientes y neutrales quedan RETRATADOS como lo que son. El fútbol, a medio plazo, hará justicia con esta banda de GITANOS. En el fondo, a la secta portuguesa le importa una MIERDA el club. Los mercenarios resultadistas son veneno para el fútbol. Todos lo sabemos.      Saludos Testigo y demás lectores del blog.

    ResponderEliminar
  4. La frase "Si el gusto por el mal fútbol fuese una bala de esa pistola, Mourinho y su Real Madrid ya estarían muertos" es para marcarla en un azulejo y colgarlo en la habitación.

    ResponderEliminar
  5. En mi opinión el Madrid puede ganar en cualquier campo y si en España más todavía porque todos sabemos que gozan del favor arbitral.
    Me gustaría que el fútbol hiciera justicia y Llouriño saliera en globo, pero la lógica y la estadísitica me dice que el Madrid seguirá vivo. Además el fútbol es bastante injusto.

    Saludos desde Pasión por el Fútbol: http://marbcn2510.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  6. Fiasco a fiasco, la multitud de abducidos por Mourinho ve clarear sus filas. Si eliminan al R Madrid de la Champions y la Copa, las deserciones serán legión.

    De Mourinho quedará un análisis sociológico alrededor de una pregunta: Cómo consiguió tener seguidores un sacamuelas que les dio tan poco?  
    No fue por su juego, un cero patatero. 
    No fue por sus éxitos, tan sólo una liga y una copa tras correr una maratón de 500 M €.

    Fue por un intangible, por una chulería insolente que conectaba bien con añoranzas de tiempos remotos y con el carácter de un considerable sector de la merengada.
    Sólo hay que ver quienes son los últimos que le defienden a capa y espada: los radikales del ultrasurismo, el facherío irredento, los vociferantes.

    Los encantadores de serpientes funcionan porque hay serpientes.

    ResponderEliminar

Si quiere expresar su opinión, regítrese en alguna de las opciones en solo 2 minutos o hágalo de forma anónima.