José Carlos del Coso: Esta es mi opinión y afortunadamente solo tengo una. Le guste a quien le guste y le pese a quien le pese.


5 de septiembre de 2012

Iker, Xavi, los Santos Inocentes


Ya hace un tiempo que me vienen dando un poquito de vergüenza propia, no solo el desenlace, sino las candidaturas a los premios Príncipe de Asturias, al menos en lo que a su parcela deportiva se refiere. Digo vergüenza propia y no ajena porque esos premios los dan en nombre de todos los españoles y mi DNI lo adorna la bandera española en la parte superior izquierda. Nos muestran a Iker Casillas y a Xavi Hernández como el mejor modelo a seguir y nos dicen con el premio que en la actualidad no hay otro mejor. Nos dicen sobre ellos que "simbolizan los valores de amistad y el compañerismo más allá de la máxima rivalidad de sus respectivos equipos" y que "su comportamiento deportivo es un modelo para los jóvenes". "ambos, que han conseguido los títulos más importantes con sus clubes y la selección española, son un ejemplo de juego limpio que es admirado por todos" y que "juntos han mostrado una actitud conciliadora que ha limado las tradicionales diferencias entre jugadores y aficiones". "Iker y Xavi mantienen una estrecha amistad desde que ganaron con la selección el mundial sub 20 de Nigeria en 1999 y el paso del tiempo ha fortalecido esa relación por encima de los enfrentamientos y pasiones", concluye el jurado. En definitiva. Que le dan el premio porque son muy buenos amigos, porque han ganado mucho y porque no se han dado de mamporros en el campo a pesar de haber tenido motivos. Jamás nadie ha recibido un Príncipe de Asturias tan vacío como este. Premio a la santidad deportiva, premio a la inocencia deportiva.