José Carlos del Coso: Esta es mi opinión y afortunadamente solo tengo una. Le guste a quien le guste y le pese a quien le pese.


4 de febrero de 2013

La saliva de dios

Ya están tardando los brokers de la bolsa madrileña en orientar las inversiones de sus clientes a la saliva de Messi. No me he vuelto loco, la saliva de Leo Messi parece que cotiza más alto que sus goles, sus quiebros o sus pases. Sus glándulas salivales son más importantes que sus pulmones ¿Escupirá Messi en su próximo partido? LBapuestas, Bwind, Bet365, encuesta de Punto Pelota. No pongan un GPS en sus botas, pónganlo en ese líquido acuoso orientable en la dirección que decida el fabricante. Paren las rotativas porque Messi ha escupido sobre el césped del Bernabéu, continúen las rotativas aunque Messi tenga cuatro balones de oro,  Champions, Botas de Oro, record histórico de goles y lleve trece partidos consecutivos marcando. A esos pequeños detalles futbolísticos hay que añadir la nueva proeza basada en lanzar esputos contra un banquillo desde diez o quince metros. Nuevo record Guinnes en lanzamiento orientado.
Mientras Messi escupe saliva, otros escupen mentiras o cuanto menos verdades indemostradas. El hecho de que Messi se deshaga de sus sobras bucales en una posición paralela con respecto al banquillo madridista no demuestra en modo alguno la intención de menospreciar a los integrantes del mismo. Ni la distancia, ni la dirección parecen jugar en contra del astro argentino. Si no se puede demostrar la voluntariedad de unas manos dentro del área cómo vamos a demostrar la voluntariedad de la acción de escupir contra algo tan lejano. Supongo que si hubiese girado el cuello noventa grados, podrían haber dicho que escupió contra el fondo Sur en un claro intento de fomentar la violencia, o si hubiese escupido más alto, quién sabe si el objeto de su ira no hubiese sido Florentino Pérez o el propio Sandro Rosell en el palco por no vender a Villa en el mercado de invierno. Quizás el meteorólogo de la Sexta pueda indicarnos la dirección del viento en ese momento; el arquitecto de punto pelota la distancia; y la voluntariedad de la acción puede determinarla Sergio Ramos o Diego Costa a los que se les acredita una gran experiencia.
La intención de Messi, la desconozco por completo. Quizás, simplemente quisiese librarse de ese engorroso excremento por vicio habitual, quizás estuviese resfriado, quizás quisiese humedecer el terreno de juego conociendo la fea manía de Mourinho de no regarlo cuando le visita el Barcelona, o quizás, solo él lo sabe, quiso meterle un salivazo en el ojo a Mourinho para vengar a Tito Vilanova. Lo que sí sé con certeza es que la gente ve lo que quiere ver y obvia lo que no. Díganme que tienen algo mejor contra Messi, díganme que no han basado todas sus esperanzas de desacreditar su educación en un mero esputo a diez metros de distancia del supuesto objetivo y grabado con una cámara trasera que desvirtúa la distancia, la posición, el tamaño y la dirección de los objetos. El aficionado mourinhista necesita algo más porque no puede basar todo su desprecio en un axioma tan vacío de contenido. Que se hayan creído a Mourinho no les hace tan débiles como para pensar que se pueden creer cualquier cosa como esta.
Lo que está claro es que la saliva de unos no vale lo mismo que la de otros ¿Acaso vale lo mismo la saliva de Messi que la de Ramos o Costa, o la saliva de Costa que la de el bético Amaya? Cuestión genética o geográfica, para algunos parece más deplorable el acto de Messi o Amaya que el de Ramos o Costa. Últimamente solo se escupe en Madrid, pero no es lo mismo escupir a Madrid que desde Madrid. Echemos pecata minuta a las acciones de Ramos o Diego Costa y echemos al comité de competición para que entre de oficio encima de Amaya. No sé si será el clima, el ambiente o la sequedad del aire, pero a Piqué le dio por escupir a Cortés en el autobús de España en la capital madrileña, Messi también escogió Madrid, como Ramos, como Costa y como Amaya. Porque si bien la saliva de Amaya no cotiza igual que la de Ramos, tampoco es lo mismo expulsarla en el Arcángel que el Bernabéu o en el Sánchez Pizjuán que en el Calderón. La de Messi es saliva diferente pues es la saliva de dios y para desviar problemas mayores, un salivazo de dios bastará para sanarlos.
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6 comentarios:

  1. Estan como motos y no saben que inventar para no hablar de lo que deben.
    Te dejo un cuentecito que habla de eso. 
    http://unblogmuycule.blogspot.com.es/2013/02/si-hay-que-mentir-se-miente.html

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  2. Totalmente de acuerdo. Es que la prensa madrileña es impresentable. Que cojan recortes de la de Barcelona. Creo que a los becarios del New York Times los están enviando unos meses a Barcelona para que aprendan ética, rigor y objetividad en el Sport, El Mundo Deportivo y TV3. Lo que más admiran son las portadas. Saludos y ánimo en tu cruzada

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  3. Creo que nadie duda que Messi es un jugador fuera de lo normal, posiblemente el mejor. Pero hasta estas personas se equivocan. No hay que escandalizarse pero tampoco defender su error.

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  4.  Totalmente de acuerdo. Es que la prensa madrileña es impresentable. Que
    cojan recortes de la de Barcelona. Creo que a los becarios del New York
    Times los están enviando unos meses a Barcelona para que aprendan
    ética, rigor y objetividad en el Sport, El Mundo Deportivo y TV3. Lo
    que más admiran son las portadas. Saludos y ánimo en tu cruzada

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  5. Acusar a Messi sin pruebas es lo único que les queda. No pueden con él dentro del campo y su envidia es tan grande que intentan malmeter para que la gente piense que es antideportivo
    Tienen tanta mierda dentro del Madrid que tienen que encontrar algo en el Barça para poder justificarse.

    Os dejo un buen enlace sobre el mejor equipo del mundo y de la historia: http://marbcn2510.blogspot.com.es/

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  6. me he gustado mucho tu artículo.

    un saludo

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